El alcalde de Lorca, Diego José Mateos, el vicealcalde y concejal de Economía, Francisco Morales, y el concejal de Urbanismo, José Luis Ruiz Guillén, han presentado la nueva ordenanza de ruido que se presentará en el Pleno Municipal de enero y que impulsa el ocio en el municipio a la vez que respeta el descanso vecinal junto a los presidentes de CECLOR y la Federación de Asociaciones de Vecinos de Lorca, Juan Jódar y Pedro García.
Mateos ha explicado que “desde el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Lorca somos conscientes de la necesidad de establecer medidas que permitan compatibilizar el bienestar ciudadano con la hostelería de nuestro municipio y es precisamente a través del consenso y la participación ciudadana desde donde nace esta nueva ordenanza y con el firme objetivo de impulsar las actividades de ocio en Lorca pero a su vez respetando el descanso y la convivencia ciudadana y a todos aquellos lorquinos y lorquinas que residan en zonas cercanas a establecimientos hosteleros”.
El Primer edil ha detallado que “la ordenanza define los grados de insonorización de los locales, de acuerdo con la legislación vigente; establece un control de las emisiones de ruidos desde el propio Ayuntamiento para las actividades más ruidosas y se adecúan las exigencias de mínimos en anchos de calles y superficies de locales para permitir un mayor aprovechamiento en nuestro casco histórico y, por consiguiente, su dinamización social”.
“Asimismo, los salones de juego pasan a tener la consideración, a efectos de control de ruidos, de pubs y bares con música y los vecinos serán parte del seguimiento de la Ordenanza quedando incorporados en la Mesa contra la Contaminación Acústica”.
Mateos Molina ha indicado que “en cuanto a los regentes de locales de hostelería y comercios, se permitirá la instalación de televisión e hilo musical en todos los bares y actividades que dispongan o tramiten licencias con música; los establecimientos más ruidosos tendrán que disponer de aparatos de control de ruidos que tendrán un seguimiento por parte del Ayuntamiento y el resto tendrán limitadores sonoros en el propio establecimiento”.
“Además, se modifican las condiciones de anchos de calles y superficies mínimas para abrir un local pasando de 7 a 5 metros cuadrados y de 100 a 55 metros cuadrados para seguir trabajando en la implantación de facilidades para el comercio y la hostelería en el casco histórico que repercutan en su rehabilitación y, también, se permitirá en horario de tarde actuaciones en directo en actividades como pubs o discotecas, ya que se está demostrando que este tipo de actividades suponen un importante reclamo tanto para nuestros vecinos y vecinas como para municipios vecinos”.